¿Para que dormir si podemos vivir...?

No…!!! Por favor…
Que complicado, imaginen… salir después de la pega, viajar sin descanso 120 Kmts., no dormir, arrojarse en aguas calientes y barrosas, disfrutar de un cálido baño termal y de una calida compañía… dejarse llevar por las estrellas y la noche… esa eterna noche que pasa más rápido de lo que esperamos… de lo que creemos, de lo que somos capaces siquiera de percibir.
Al regreso, 120 kmts más…y una experiencia al borde de la racionalidad, al límite de la irracionalidad. Sueño, mucho sueño pero que importa… la experiencia ya está adentro… se digiere lentamente, tanto como para que dure para siempre.
“Las personas calculadoras son pusilánimes, no son capaces de realizar recorridos extremos. Los jugadores que “han perdido la cabeza” me interesan mucho más...